El jardín digital de Dear Notes

La razón poética de María Zambrano

Zambrano propuso la razón poética como un camino para pensar más allá de la lógica estricta. No contra la razón, sino más allá de su versión más reducida y demostrativa. Una forma de razonar que no necesita convertirlo todo en definiciones cerradas y que se permite convivir con lo que no encaja del todo.

En este horizonte, la metáfora no aparece como un adorno, sino como un verdadero medio de conocimiento. Cuando Zambrano escribe sobre el exilio y lo llama una herida, no está usando un recurso literario, está diciendo algo que solo puede ser dicho así. La imagen abre un acceso a la experiencia que el lenguaje puramente conceptual no alcanza.

Pensar con razón poética es reconocer que lo que sentimos, intuimos o todavía no sabemos explicar también pertenece a lo pensable. Es dejar que la filosofía se acerque a la vida sin domesticarla, sosteniendo el misterio en lugar de borrarlo.

Más que una alternativa frente a la razón, es un recordatorio: no todo se resuelve con claridad y método. También pensamos cuando hablamos con imágenes, cuando compartimos lo inacabado, cuando dejamos que las palabras acompañen en vez de imponerse.